Listas Levante-EMV » VI Edición - 2017

La primera ofrenda

Mamá, me canso. – Ya llegamos. Le llevamos flores a la Virgen. Estás tan guapa de “fallerica” que se va a poner muy feliz. – Si, pero me canso…

Encauzando la desembocadura hasta la multitudinaria plaza, la cogió en brazos. Respiró hondo conteniendo fuerzas y emociones. Cada segundo más intenso: aplausos arreciando al paso. Música resonando multiplicada en la angosta calle. El aroma, envoltorio embriagador. Focos y destellos resplandecientes advertían del momento más emotivo. Escuchó nombrarles y al son del pasodoble, desfilaron altivos hasta sus pies.

Vamos hija. Dale las flores a la Mareta. – ¿Mamá, puedo quedármelas para ti? Estoy tan contenta.