Listas Levante-EMV » V Edición - 2016

El yayo

Amparo encaraba el último tramo de la calle San Vicente al ritmo de Paquito el Chocolatero. El cancán hacía balancear con gracia el vuelo de su vestido turquesa, y ausente se dejaba arrastrar hacia la Plaza de la Virgen. Triste recordaba la promesa de su abuelo por la mañana: “Segur que vaig!!!”, pero sabía que no. El último achuchón lo había dejado tocado. Resignada, los acordes ahora de El Fallero la llevaron en volandas hasta la Maredeueta. Entonces lo oyó: “Amparo!!!” ¡Era el yayo! ¡Había venido! Llorando entregó su ramo mirándola agradecida y al buscarlo de nuevo… ya no estaba.