Listas Levante-EMV » VII Edición – 2018

Mis abuelos

Cada día tenían más arrugas y el color del pelo más plateado. Ya aparentaban una edad muy avanzada. Ese año me dediqué a ellos en cuerpo y alma. Fue maravilloso.
Cuando los llevé junto a otros ancianos y los dejé allí aquella noche, por un momento, su silencio se hizo infinito.
Al recoger las cenizas de la cremà, me sentí muy bien por haber hecho aquellos dos ninots con tanto cariño para una falla que homenajeaba a nuestros mayores. Recordé a mis abuelos de carne y hueso. Y un castillo de emociones iluminó todo mi interior.