Listas Levante-EMV » V Edición - 2016

La primera

El hombro de su padre resultó ser una almohada perfecta. Se acomodó. El sol de Marzo le golpeaba en la mejilla. Ahí le entró la modorra. Las conversaciones de la multitud formaban un ‘runrun’ ininteligible a su alrededor. Con eso terminó de dormirse. Las explosiones, lejos de despertarle, le hicieron soñar.
Cuando todo termino, fue golpeado por ese segundo de silencio entre el final y los aplausos. Se despertó. Antes de que la gente empezara a retirarse de la plaza, ya estaba llorando.