Luz, color y fuego

Una explosión de colores ilumina todo el cielo, continuas formas circulares emergen en el horizonte, se sobreponen a la oscuridad y forman un hermoso cuadro, digno de la atención que el público embriagado por el momento admira sin perder detalle. Un magnífico espectáculo que precede al momento más esperado, una bengala sujeta por una mano temblorosa que prende la mecha, una sucesión de detonaciones mientras la traca zigzaguea hasta terminar en las mismas entrañas del monumento, desde ahí, emergen las llamas que se elevan hacía el cielo y perduran hasta consumirlo todo en cenizas.